Ya se iniciaron las acciones de movimiento de tierra en áreas donde se levantará el parque eólico de Manatí. A juzgar por imágenes publicadas en redes sociales por pobladores del Puerto de Manatí y factores gubernamentales, se observa la actividad de vehículos pesados para el despeje de la zona, la cual se caracteriza por la presencia de una tupida vegetación de costa.
Foto tomada del perfil de Facebook de Yamilet Borrero Labrada, intendente municipal.
Las imágenes y textos que las acompañan precisan que las acciones están encaminadas a dejar listo el paso para "la colocación de la torre de medición de los vientos que permitirá la inversión...", al tiempo que otras retratan al personal que labora en esta importante obra que tributará al cambio de matriz energética que aspira el país para 2030.
Según fuentes periodísticas, el parque eólico de Manatí será el tercero que se ejecute en Las Tunas (se avanza en Herradura I y Herradura II, en Jesús Menéndez) y el mismo fue adjudicado a la empresa española Baranca Stream Sociedad Limitada.
Esta entidad se dedica, entre otros asuntos, al "desarrollo de energías renovables en países emergentes, aprovechando el conocimiento del sector, así como las sinergias que genera la incorporación de un equipo técnico, económico y financiero de gran experiencia, que ha instalado previamente más de 2.500 MW a nivel nacional e internacional en los últimos 20 años".
Por su parte, el sitio del Ministerio de Energías y Minas precisa que el parque a instalar en la zona costera manatiense tendrá una potencia de 122 MW y este se ejecutará con capital extranjero.
Una vez que empiecen a funcionar los emplazamientos que construyan los inversores extranjeros, se les comprará la energía y cuando hayan recuperado su inversión y obtenido sus utilidades, esas instalaciones pasarán a formar parte del patrimonio nacional.
De acuerdo con estudios realizados, las extensas llanuras y la vegetación baja son elementos favorables que determinan el empleo de los vientos alisios, que soplan desde el océano Atlántico por la costa norte.
El Centro Provincial de Meteorología en Las Tunas y otras instituciones han confirmado que en esta zona se producen corrientes de aire sostenidas de cerca de siete metros por segundo a más de 50 metros de altura.
Hasta 2030 el país prevé que el 24 por ciento del consumo de electricidad provenga de fuentes renovables de energía. Este programa perfila a Las Tunas como una de las provincias cubanas que dependerá cada vez menos de los combustibles fósiles, cuando sus parques eólicos se encuentren en activo junto a los solares fotovoltaicos y otras variantes que se estudian.
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